Fundada en 1984 en Parma para ofrecer un servicio de mantenimiento y asistencia a la industria alimentaria, con el tiempo -y más concretamente en 1998- Idroinox Impianti ha ampliado su actividad principal a otros segmentos estratégicos del mercado, como el sector farmacéutico, en el que es más activa en la actualidad. Gracias a la experiencia adquirida en más de 35 años de actividad, esta excelencia italiana ha centrado su actividad principal en el proceso de producción de la industria farmacéutica, trabajando en proyectos para las principales empresas nacionales e internacionales del sector. Paolo Giacopinelli, director general de Idroinox Impianti, nos habla de los objetivos de una empresa que mira al futuro con optimismo.
por Roberta Imbimbo
Dr. Giacopinelli, ¿con qué misión nació Idroinox Impianti? Cuéntenos un poco sobre su historia.
Fue el 29 de febrero de 1984 cuando, junto con otros cinco valientes y apasionados empresarios de Parma, creé una pequeña empresa familiar que operaba principalmente en el mercado de la alimentación. Con el tiempo, sin embargo, también tras una reorganización de la gobernanza (en 2010 los socios pasaron a ser dos, el presidente Nicola Marchese y yo), la empresa amplió su negocio principal a otras actividades estratégicas, entrando con fuerza en el mercado farmacéutico, sector que sigue representando el 90% de su facturación. En la actualidad, Idroinox Impianti es una empresa altamente especializada en el diseño y desarrollo de sistemas de producción necesarios para la elaboración de productos farmacéuticos, según dictados exclusivamente científicos, como mezclas particulares necesarias para la producción de medicamentos o productos médicos de alto valor técnico y cualitativo. Gracias a la experiencia y los conocimientos técnicos adquiridos a lo largo de muchos años de actividad, y sin embargo gracias a un equipo altamente cualificado, la empresa ha podido crecer considerablemente tanto en términos de expansión geográfica -hoy en día cuenta con cientos de clientes activos en Italia y en el extranjero- como en tamaño -hoy en día emplea a unas cuarenta personas- y en términos de facturación, que ha alcanzado unos 7 millones de euros al año.
¿Qué tipo de mercado es el que usted opera? ¿Qué peculiaridades le distinguen de sus competidores?
En un mercado cada vez más competitivo, caracterizado por la presencia de otros actores bien estructurados, Idroinox Impianti ha conseguido diferenciarse y afirmar su liderazgo gracias a la calidad, fiabilidad y profesionalidad demostradas a lo largo de los años, y gracias a las considerables inversiones realizadas en tecnología, investigación y formación; inversiones decisivas que le han permitido mantenerse a la vanguardia de un mercado en constante evolución, satisfaciendo así de forma proactiva las necesidades de cada cliente, en su mayoría grandes multinacionales del sector farmacéutico. Recientemente, hemos invertido mucho en las últimas tecnologías y en procesos de investigación ad hoc: durante la pandemia, por ejemplo, nos centramos en el tratamiento del Covid-19, colaborando estrechamente con Pfizer. Otro rasgo distintivo nuestro es la capacidad de haber innovado los procesos de producción y organización de forma sostenible, convirtiéndonos así en actores activos de la nueva revolución verde. Con nuestros valores éticos, nuestra marca rinde cada día homenaje a una cultura empresarial cada vez más orientada al respeto, la integridad y la innovación, con la vista puesta en la sostenibilidad social, medioambiental y económica.
Son muchos los logros alcanzados en todos estos años. ¿Objetivos futuros?
En un mercado que ofrece grandes perspectivas de crecimiento, nuestro objetivo prioritario es salvaguardar la eficacia y fiabilidad de nuestros procesos de producción, para garantizar siempre productos de alta calidad, trabajando al más alto nivel. La calidad es un requisito esencial para nosotros, y es el impulso que nos ha llevado a prestar mucha atención a los protocolos de control y a trabajar duro para ofrecer lo mejor que el mercado puede exigir. El impacto de esta visión ha demostrado ser poderoso, y nos ha permitido convertirnos en poco tiempo en una de las empresas más importantes de Italia para cientos de clientes que han depositado su confianza en nuestro trabajo. Y a quienes hoy doy las gracias porque también gracias a ellos hemos conseguido estos extraordinarios resultados. Sin embargo, a pesar de nuestros logros hasta la fecha, la empresa seguirá desarrollando innovaciones en los procesos y nuevas tecnologías para el tratamiento de patologías concretas (pronto presentaremos una patente para sistemas de diálisis).
