En 1973, los empresarios Francesco Cialdella y Savino Maldera fundaron su primera empresa activa en el sector de la ingeniería; tras una escisión societaria, en 2006 nació Steel Tech S.r.l., una costilla de la empresa matriz de la que ahora los hijos de los fundadores, Alfonso Cialdella, Vito y Aldo Maldera, forman parte del Consejo de Administración y Giusy Cialdella coordina los proyectos de Investigación y Desarrollo. Gracias a ellos, esta PYME joven y dinámica ha experimentado un crecimiento sorprendente en poco tiempo, tanto en términos de volumen de negocios como de estructura organizativa, logrando así obtener importantes galardones, entre ellos, el último en orden de tiempo, el Premio a la Excelencia Italiana 2022 recibido el pasado mes de diciembre durante una ceremonia en el Campidoglio patrocinada por el Consejo de Ministros.
por Roberta Imbimbo
Alfonso Cialdella, Presidente del Consejo de Administración de Steel Tech, ¿con qué misión nació su empresa?
Gracias a la experiencia adquirida por los socios fundadores en más de 50 años de actividad en el sector de la ingeniería, Steel Tech Srl nació con el objetivo de afirmar su liderazgo en el campo de la fabricación de depósitos para plantas industriales. Gracias a una visión estratégica y a un enfoque empresarial innovador, con el tiempo esta empresa de ingeniería de fabricación ha conseguido ampliar su mercado objetivo, llegando a ser operativa en sectores estratégicos como el químico, el farmacéutico, el bioenergético y el medioambiental. La cuidada organización de la empresa, el alto nivel de conocimientos especializados adquiridos a lo largo de muchos años de presencia en el mercado y las enormes inversiones realizadas en innovación tecnológica le han permitido suministrar decenas de miles de depósitos, en Italia y en Europa, muy avanzados y conformes con todas las normativas vigentes (consiguiendo así obtener todas las certificaciones de calidad, proceso y seguridad necesarias para operar en sectores particulares, como el químico).
Steel Tech es una empresa con un corazón verde que siempre ha tratado de combinar objetivos de desarrollo empresarial con políticas de bajo impacto ambiental.
Exactamente. El uso de fuentes de energía renovables en nuestros procesos de producción, el tratamiento eficaz de los residuos y, en general, la adopción de un modelo de desarrollo sostenible han sido siempre nuestro modus operandi, junto con la responsabilidad social y medioambiental de la empresa. Gracias a nuestra decisión de armonizar los objetivos de crecimiento económico con las políticas sociales y medioambientales -conjugando así innovación, productividad, competitividad y respeto al medio ambiente-, a lo largo de los años hemos conseguido convertirnos en un altavoz de las mejores prácticas para todo el sector, sensibilizando a nuestros clientes y proveedores sobre estos temas tan importantes, porque estamos firmemente convencidos de la necesidad de que toda la cadena de suministro sea sostenible y esté controlada a 360 grados. A todo ello se suma nuestra clara vocación innovadora: utilizando las mejores tecnologías disponibles en el mercado e invirtiendo cada año en importantes proyectos de I+D, creamos productos cada vez más tecnológicamente eficaces y con una visión a largo plazo.
¿Qué importancia tiene para usted el capital humano?
Muchísima. Nuestros empleados son nuestro capital más importante. De hecho, son las personas que trabajan con nosotros y para nosotros las que dan valor a nuestro trabajo a través de la competencia, la pasión y la determinación; todos ellos ingredientes muy importantes que se traducen en un inestimable valor añadido al servicio de nuestros clientes. Siempre hemos creído en el valor de los jóvenes (no en vano la media de edad en la empresa es de 38 años), y por eso cada año invertimos fuertemente en su formación, al tiempo que creamos las condiciones para que cada uno de ellos tenga la oportunidad concreta de crecer personal y profesionalmente dentro de un entorno de trabajo sano, cohesionado y estimulante. Además, el relevo generacional es muy frecuente aquí: los trabajadores próximos a la jubilación transmiten a sus hijos los conocimientos adquiridos durante muchos años de trabajo. Es un gran orgullo para nosotros. Creemos mucho en las nuevas generaciones, que deben ser capaces de aportar a la empresa su nueva mirada sobre el mundo. Una mirada que, en consonancia con unos retos cada vez más ambiciosos, les anime a experimentar soluciones nuevas e innovadoras. Pero para que estos mecanismos de renovación funcionen perfectamente, es necesario que a las nuevas generaciones se les reconozca realmente un papel activo en la empresa y, sobre todo, que se les ponga en condiciones de desempeñarlo lo mejor posible. Especialmente en el Sur, es necesario que las organizaciones den un salto cualitativo para ser no sólo más atractivas para los jóvenes, sino también más orientadas hacia el futuro, invirtiendo en figuras profesionales cualificadas capaces de guiar sabiamente a la empresa por su senda de crecimiento y desarrollo.
Uno de los principales dilemas de nuestro tiempo es precisamente el relevo generacional.
Hoy en día, muchas PYME no sobreviven a la muerte del padre fundador, pocas llegan a la segunda generación. ¿Por qué?
Porque en la delicada transición generacional a menudo se pierde gran parte del know-how acumulado por el empresario, que no siempre es capaz de “gestionar” el contexto operativo y organizativo, creando una brecha generacional perjudicial para la supervivencia de la propia empresa. Precisamente en estos casos es fundamental la presencia de un gestor cualificado, un guía fuerte y fiable que sepa apoyar al capital humano con una adecuada transferencia de conocimientos, y que sepa indicar a la empresa las estrategias necesarias para alcanzar los objetivos empresariales con el fin de ser cada vez más competitiva en su mercado de referencia. Pero igual de importante es que en la delicada y compleja transición generacional, el fundador deposite toda su confianza en sus sucesores y éstos ejerzan realmente un papel activo y de guía dentro de la empresa familiar. Nuestra empresa es orgullosamente un ejemplo de cómo la transición generacional puede producirse de forma suave y espontánea. Hoy en Steel Tech hay dos generaciones que pueden contar la historia de una empresa histórica, reconocida como Excelencia y Líder en la transformación del acero inoxidable. Dos generaciones diferentes que dialogan y se confrontan constructivamente cada día con el objetivo de innovar y mirar al futuro, pero con un valor añadido muy importante: ¡nuestra historia!
Para más información (https://steeltechitalia.com)
