La espondilolistesis es una patología caracterizada por el desplazamiento hacia delante de una vértebra con respecto a la subyacente. Nos lo cuenta el cirujano Francesco Finocchiaro, jefe de la Unidad Operativa de Cirugía Vertebral de la Clínica Rizzola de San Donà di Piave (VE). Gracias a las considerables inversiones en tecnologías avanzadas y a la mejora continua de las técnicas diagnósticas y quirúrgicas, la clínica véneta garantiza alta calidad, seguridad y comodidad para los pacientes y sus familias. Desde 2020, es el Centro Europeo de Referencia para la Cirugía Robótica Vertebral.
por Roberta Imbimbo
Dr. Finocchiaro, ¿qué se entiende por espondilolistesis?
La espondilolistesis es una condición patológica caracterizada por un desplazamiento lento y progresivo hacia delante de una vértebra respecto a la subyacente. Según la clasificación de Marchetti y Bartolozzi, las espondilolistesis pueden dividirse en espondilolistesis evolutivas y adquiridas. Estas últimas, a su vez, se subdividen en traumáticas, posquirúrgicas, patológicas (por tumores y enfermedades óseas) y degenerativas (debidas a la degeneración artrósica del disco intervertebral o de las facetas articulares).
Las espondilolistesis del desarrollo afectan principalmente a individuos en la infancia o la juventud y suelen estar relacionadas con alteraciones o anomalías en el desarrollo de las partes óseas de una vértebra o con un defecto de osificación del istmo vertebral. Están causadas por una falta de osificación del cartílago conjugador a nivel del istmo, lo que se conoce como espondilolistesis, que genera una separación entre el cuerpo vertebral y el arco posterior.
La espondilolistesis adquirida, en cambio, se produce como consecuencia del desgaste de las masas articulares y del disco vertebral, que se vuelven progresivamente hipermóviles y generan una menor resistencia en la articulación de las vértebras y, por tanto, una inestabilidad considerable. La espondilolistesis ístmica afecta al 6-8% de los adultos y al 4-6% de los individuos entre 6 y 18 años, mientras que es rara antes de los 5 años. En cambio, la espondilolistesis degenerativa afecta al 13-16% de los adultos.
¿Cuáles son los síntomas?
En los sujetos jóvenes, el síntoma suele ser el dolor de espalda, el llamado lumbago, que tiende a exacerbarse con los movimientos de la parte superior del cuerpo y se resuelve con el reposo en cama. En los adultos, pueden producirse episodios agudos de lumbalgia, que se alternan con periodos de bienestar temporal. Sin embargo, el dolor tiende gradualmente a hacerse persistente e irradiarse a las extremidades inferiores, dificultando las actividades cotidianas y deportivas. Cuando la inestabilidad se asocia también a compresión sobre las estructuras nerviosas, pueden aparecer síntomas radiculares como la ciática. En algunos casos, el paciente camina entre 100 y 200 metros, pero luego se ve obligado a detenerse debido al dolor. Hay circunstancias en las que la espondilolistesis y a menudo la espondilolisis pueden ser completamente asintomáticas o poco sintomáticas.
¿Cómo se diagnostica esta enfermedad?
Suele descubrirse por casualidad durante exámenes radiológicos a los que se someten los pacientes por otros motivos. En presencia de síntomas, la confirmación del alcance del desplazamiento vertebral y, por tanto, de la gravedad de la afección patológica, sólo puede obtenerse con un examen radiográfico.
¿Cómo se trata la espondilolistesis?
El tratamiento depende de la gravedad de los síntomas y de la edad del paciente. En pacientes jóvenes, en ausencia de síntomas dolorosos, se recomienda únicamente la observación y, eventualmente, un control radiográfico periódico para evaluar la progresión del deslizamiento vertebral. Si el dolor lumbar se hace frecuente, se propone un tratamiento conservador: en la fase aguda, cuando el cuadro clínico está dominado por el dolor lumbar, se administran antiinflamatorios y relajantes musculares. Una vez que la fase aguda ha remitido, se prescribe una terapia de rehabilitación física específica.
En los adultos, es decir, en caso de espondilolistesis ístmica o degenerativa, se recomienda un tratamiento conservador en las fases iniciales, es decir, medicación, fisioterapia o el uso de ortesis. Si este enfoque no funciona y los síntomas empeoran, se evalúa la opción quirúrgica. Esta última se convierte en el tratamiento de primera elección si los trastornos radiculares en los miembros inferiores -ciatalgias, déficits neurológicos- son graves y especialmente incapacitantes.
¿Cuáles son las fronteras quirúrgicas para tratar esta patología?
Además de la cirugía abierta tradicional, reservada a los casos más complejos en los que se desgarra el tejido muscular y se opera a campo abierto, gracias a la mejora de las técnicas quirúrgicas y a los avances tecnológicos, ahora es posible operar de forma mínimamente invasiva, sin necesidad de abrir el canal raquídeo (descompresión indirecta). Esto es posible, en particular, gracias a la robótica: la operación es “a la medida del paciente”, es decir, cada vez más precisa, eficaz y exacta, lo que se traduce en menos complicaciones operatorias y tiempos de hospitalización más cortos. La estancia media en el hospital es de 48/72 horas y la recuperación postoperatoria mucho más rápida.
El Centro de Tratamiento Rizzola es una excelencia italiana. Háblenos de él
Fundada en 1946 y afiliada al Servicio Nacional de Salud, la Clínica Rizzola es hoy el Centro Europeo de Cirugía Robótica Vertebral. Gracias a enormes inversiones en innovación tecnológica y a equipos multidisciplinares y altamente especializados, el centro del Véneto es capaz de garantizar al paciente el mejor nivel de diagnóstico y, cuando es necesario, de cirugía.
El diagnóstico instrumental se apoya en la resonancia magnética de alto campo, la tomografía computarizada de capa fina y la radiología digital EOS. Asimismo, una plataforma de neuronavegación robótica muy avanzada y un sistema de imagen intraoperatoria tridimensional permiten realizar intervenciones quirúrgicas con precisión milimétrica, reduciendo considerablemente los márgenes de error con resultados óptimos.
El hecho de que la Clínica Rizzola opere en convenio con el Servicio Nacional de Salud hace que su excelencia tecnológica y profesional esté al alcance de todos.
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